16 de febrero de 2011

De la intimidad al delito: el berlusconismo se acaba.


No es la primera vez que las perlas de Berlusconi se denuncian en los post de mi blog. Un Presidente de la Italia que insulta al Parlamento, que reconoce que paga servicios a las prostitutas, que admite que está más pálido que Obama o que le dice a las jóvenes que lo que tienen que hacer es casarse con ricos como él... que convierte sus responsabilidades en un reality show y que está causando la espectación en el mundo, parece que va a tener que poner fin a sus episodios. Se pasea de escándalo en escándalo, pero hasta ahora parece que no tenía límites. O sí, pero él pensaba que no.

Un hombre que ha visto como sus barbaridades incluso eran aplaudidas por la opinión pública, que con su ejemplo ha hecho mucho daño a la sociedad, donde el laissez faire et laissez passer se impone. Donde se permitía dar consejos y hacer críticas tremendamente dañinas, conseguía siempre los apoyos necesarios para salir de rositas de las mociones de censura. Pero con la justicia por sus delitos ha topado y parece que en esta ocasión ya no cuenta con los mismos beneplácitos. Ya era hora, hay actitudes, comportamientos y conductas que hace mucho tiempo que debían haber sido censuradas, intoleradas y denunciadas. Ante estos abusos y cretinos delincuentes que andan sueltos, no debemos ni callarnos, ni quedarnos con los brazos cruzados. Ya está bien: cohecho, abuso de poder, abuso de menores...

Más, en Diario de Cádiz.  

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